Una mujer que estuvo ‘muerta’ por 27 minutos resucitó y escribió extraño mensaje
Lo que pasa después de la muerte ha sido una de las grandes incógnitas de la humanidad. Cientos de culturas le han intentado dar una explicación desde la mitología y la religión, pero sus hipótesis siempre quedan en el campo de la especulación.
La ciencia, por su parte, se basa más en hechos cuantificables a través de la experimentación y el análisis biológico de personas fallecidas, por lo que solo podría explicar que pasa con el cuerpo cuando entra en proceso de descomposición.
Por ahora, lo que se conoce del ‘más allá’ solo ha podido ser explicado por pacientes que, por x o y complicación médica, han muerto por algunos minutos y luego resucitando para contar lo que vieron durante su pequeño lapso al mundo astral.
El caso de Tina Hines
Ese fue el caso de Tina Haines, una mujer que ‘murió’ por 27 minutos a causa de un paro cardíaco en 2018. De camino al hospital, los médicos la reanimaron más de seis veces hasta que logró estabilizarse en un centro de salud y a través de una intubación.
Sin embargo, al despertar la joven sorprendió a los especialistas y a su misma familia porque al estar mínimamente consciente pidió un bolígrafo y una hoja en blanco para escribir un peculiar mensajes en forma de garabato: “Es real”.
«Era tan real, los colores eran tan vibrantes», explicó más tarde a ‘AZfamily’, refiriéndose a que había visto a la figura de Jesucristo, asegurando que era real.

Esa fue la nota que dejó en el papel apenas resucitó.
¿Qué dice la ciencia?
Un estudio realizado en la Universidad de Michigan, Estados Unidos, reveló que existía una oleada de actividad en el cerebro justo antes de morir, mucho más alta de lo que se refleja en escaneos de una persona totalmente lúcida, despierta y consciente.
«Mucha gente pensó que el cerebro después de la muerte clínica estaba inactivo o hipoactivo, con menos actividad que en el estado de vigilia, y demostramos que definitivamente no es así. En todo caso, es mucho más activo durante el proceso de morir que incluso en el estado de vigilia”, explica el líder del estudio, el Dr. Jimo Borjigin, de la Universidad de Michigan y uno de los autores del documento.
La mujer sufrió un paro cardiaco en 2018